Nos enorgullece que nuestros comensales, cuando hablan de nosotros, nos consideren como uno de los restaurantes con más encanto de Gijón. Desde el principio, todos nuestros esfuerzos han estado enfocados en ofrecerles un buen servicio, y eso pasa por cuidar cada detalle y cada uno de los ingredientes que utilizamos en la elaboración de nuestros platos.
En La Pondala somos muy de tradiciones y una que intentamos recuperar entre nuestros clientes es la del gusto por el buen pan. No debemos olvidar que se trata de un alimento básico en nuestra dieta. De hecho, nunca falta en nuestra casa ni en nuestro restaurante, donde nos acompaña todos los días, desde el desayuno hasta la cena.
El pan ha dejado de ser un alimento accesorio para formar parte de nuestras comidas. Sin embargo, no vale cualquier pan, y tampoco hay que volverse loco por hacerse con el pan perfecto. Hacer un buen pan no es para nada sencillo, pero, por suerte para nosotros, cerca de nuestro restaurante con encanto de Gijón contamos con buenas panaderías que conocen las claves para conseguir un pan superlativo.
Para identificar un buen pan nos tenemos que fijar en su sabor y en si resulta fácil de comer. Un error bastante habitual es pensar que un pan es de calidad cuando está crujiente, ya que todo lo que es crujiente resulta mucho más apetitoso, pero no siempre es así.
Recuperando la buena fama del pan
Durante muchos años, el pan ha gozado de muy mala fama y era uno de los primeros alimentos que eliminaban las personas que estaban a dieta.
Seguro que tú también has oído en más de una ocasión eso de que el pan engorda, pero ¿es del todo cierto? Muchos le consideran el culpable de esos kilos de más que se han asentado en su cuerpo, pero, según los expertos y profesionales de la nutrición, se trata de un mito que carece de sentido, ya que no hay ningún alimento que engorde o adelgace por sí mismo. De hecho, el pan contiene únicamente entre 1 y 3 gramos de grasa por cada 100.
La clave está en no pasarse con la cantidad. Los especialistas recomiendan, por lo general, tomar unas cuatro raciones diarias de unos 50 gramos cada una.
¿Cómo identificar el pan que alimenta?
Hoy en día, existen tantas opciones y tan variadas que es normal que uno no sepa que pan comprar. Es cierto que cada vez hay más conciencia de la importancia de consumir pan artesanal en detrimento del pan industrial por lo saludable que resulta, pero ¿sabríamos diferenciarlos?
El primero no tiene nada que ver con el segundo, y viceversa. Mientras que el pan casero resulta toda una experiencia de sabor y de textura, el pan industrial carece de cuerpo y de alma.
El pan elaborado de manera artesanal no deja indiferente a nadie y desde La Pondala estamos convencidos de que se este alimento acabará convirtiéndose (si no lo es ya) en parte esencial de nuestras comidas.